Malos, duros, serios, opacos, egoístas, burros y convencidos, muy convencidos a que todo era “plata o mierda”.

Casi siempre hicieron plata desde el poder y nos hicieron mierda a todos, en el mejor de los casos. En otros, hubo miles que no pudieron contarla “nunca más”.

Lo interesante es que, salvo dos veces (Mundial 78 y Malvinas 82), jamás tuvieron el acompañamiento popular. Pero ahora, todo es muy distinto. Nos están haciendo mierda a gran velocidad, y millones de argentinos bailan a diario, como si Argentina fuera la cubierta de un enorme Titanic (desde el espacio nuestro territorio bien puede parecer un barco).

El presidente dice, solito nomás que juega “en otras ligas”. No sé cuál será, lo que sé es que, lo que le pasó a él en política, en la timba se dice ¡Qué liga! Nunca fue millonario, y dice que no le importa la plata.

Lo siento, estoy seguro que ya es archimillonario, y no digo que haya robado nada del Estado, ni parecido a lo que hicieron los pelagatos de los gobiernos menemistas y kirchneristas, que no han dejado de ostentar sus riquezas hasta hoy, en todas partes.

Estoy más cerca del arpa que de la guitarra para pensar en el odio, pero veo a cada rato manifestaciones de eso. Y ahora, a nivel internacional.

¿Odio a qué, a quiénes? Muchos deberían empezar, en nuestro país, por odiarse a sí mismos, sobre todo algunos dirigentes, porque, gracias a sus actuaciones estelares, nos pusieron a elegir al borde del abismo, y nadie quiso saltar (ni siquiera los que en 2001 decían que a los musulmanes que voltearon las Torres Gemelas, ¡Les habían pagado!)

¡Cuánta gente se ve ahora en el bajo porteño, Corrientes al fondo! ¿“Hoy pelea Loche en el Luna Park”? ¡No! Hoy, canta y baila un León, desaforado, boca sucia, insultador, grotesco, que desde hace un tiempito les encanta a los “gilitos del Barrio Norte”, pero no a los de María Elena Walsh, sino a los de la condesa Chicoff, parecidos a esos que describe Serrat en “Algo personal”.

Parece que antes del show de “the lion”, el presidente Milei presentará un libro nuevo. ¿Tendrá algunos plagios brutales como los que denunció la revista Noticias, de otros textos del mismo autor?

En fin, a veces pienso que me estoy volviendo loco y no es por amor, ¿O sí? ¿Será por amor a la Patria, a la vida solidaria, a la paz, a la cordura, a la educación, a la honradez, a la austeridad?

El Cultural

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