Apenas pasado el mediodía, la columna de docentes y vecinos se constituyó en la esquina de 22 y 9, sede de los Tribunales de General Pico, donde iniciaron su canticos y consignas en reclamo a la anulación del fallo que condenó a la docente Ana Contreras.

Tras varios minutos en esa esquina, los asistentes marcharon por 9 hasta 24 y desde allí hasta la esquina de la calle 17, sede del Juzgado Contravencional, donde volvieron a repetir los canticos y los reclamos, mientras pegaban carteles alusivos en los árboles de las inmediaciones.

Allí recrudeció el reclamo y los canticos a favor de la educación pública irrestricta y democrática, y volvieron a escucharse los pedidos de absolución de Ana Contreras, condenada por su opinión en clase sobre el conflicto palestino israelí.

Desde allí, los manifestantes se ecolumnaron hacia la calle 28 por 17, hasta llegar, entre 15 y 13, a la sede de la Delegación Zona Norte de Educación provincial, donde entregaron un  petitorio, y expresaron la gravedad que entraña para la educación la intromisión de la justicia en cuestiones pedagógicas naturales del aula.