"El Cuervo" Larroque le aclaró que la crítica es por la falta de respaldo a la gestión bonaerense en la actualidad.
En un ambiente todavía frío y distante, la Reserva Municipal Los Robles del municipio de Moreno fue el escenario del reencuentro entre el gobernador bonaerense Axel Kicillof y la ex presidenta Cristina Kirchner, con el agregado no menor del líder del Frente Renovador, Sergio Massa, quien se ofrece como mediador y garante de la unidad del peronismo de cara al 2025.
El encuentro fue organizado por el líder de La Cámpora y jefe del Partido Justicialista bonaerense, Máximo Kirchner, en la víspera de la asunción de su madre como presidenta del PJ nacional, y al cumplirse un año de la gestión nacional de Javier Milei, y del primer año del segundo mandato de Kicillof.
La intendenta local, Mariel Fernández, se sentó entre medio del gobernador y Cristina Kirchner, quienes no se dirigieron palabra entre ellos ni antes ni después de los discursos, lo que deja en evidencia que el clima sigue siendo tenso y de desconfianza, al igual que lo que se vio en el Teatro Argentino de La Plata hace un mes y medio.
Más allá de la foto de unidad, lejos estuvo el acontecimiento de decretar una pax duradera entre las principales tribus del peronismo.
El evento comenzó poco después de las 13 hs y finalizó pasadas las 16 hs, con la participación de alrededor de 60 consejeros y consejeras del partido.
Primero hablaron un consejero o consejera por sección y por rama electoral, y los cierres estuvieron a cargo de Máximo Kirchner, Massa, Kicillof y Cristina Kirchner, en ese orden.
El "bonus track" vino de parte de Andrés “el Cuervo” Larroque, quien habló a capela porque ya habían apagado el micrófono, mientras los dirigentes camporistas se dispersaban. “Cristina lo escuchó bien”, aclararon fuentes cercanas a la gobernación.
Resulta que el ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense salió a escena fuera de protocolo para corregir a Cristina Kirchner, quien minutos antes había dicho que nadie podía objetarle falta de apoyo a Kicillof, cuando había sido ella quien lo eligió primero como ministro de Economía, y después como gobernador.
Larroque le aclaró a "La Jefa" que la crítica a ella es por la falta de apoyo a la gestión en la actual coyuntura, durante el 2024, frente a los ataques permanentes de Javier Milei.
Efectivamente, Cristina Kirchner dejó de apoyar públicamente a quien fuera su protegido político y dirigente predilecto, cuando éste comenzó a construir un proyecto presidencial sin pedirle permiso.
Máximo Kirchner empezó a hablarle mal de Kicillof a su madre desde que se definieron las candidaturas en 2023, pero ella recién le hizo caso este año, y más especialmente cuando el gobernador rehusó definirse en la interna que no fue, para conducir el PJ que la ex presidenta iba a mantener contra Ricardo Quintela.
En su intervención sin micrófono, Larroque les pidió tanto a Cristina Kirchner desde el PJ nacional como a Máximo Kirchner desde el PJ bonaerense, que no escatimen en la defensa irrestricta del Gobierno bonaerense.
Hubo otro momento de tensión más temprano, cuando el intendente de Carmen de Areco, el camporista Iván Villagrán, tomó la palabra para arremeter contra el ministro de Trabajo bonaerense, Walter Correa, por las “inspecciones” que hace su cartera en el municipio.
La alusión pateó el avispero y se escucharon insultos a viva voz, que fueron aplacados tras el pedido de Larroque a Kirchner, para que contuviera a su tropa.
Más allá de esos cruces picantes, hubo pedidos enfáticos de los dos lados.
La Cámpora, en contra del desdoblamiento electoral en la provincia
La Cámpora volvió a plantear la necesidad de que Kicillof no desdoble las elecciones para que “nadie se salve solo”, y que "el peronismo sea uno solo en la provincia de Buenos Aires”.
“La mayoría del peronismo en contra del desdoblamiento. Y por otro lado, que si el peronismo va dividido, es muy difícil ganarle a Milei”, indicaron a NA fuentes de la agrupación de Máximo Kirchner.
En ese punto, La Cámpora coincide con Massa, quien propone que los comicios se desarrollen en “un solo día, y que la gente compare la Boleta Única de Papel para cargos nacionales, y el sistema tradicional para cargos provinciales y municipales, según supo la Agencia Noticias Argentinas de altas fuentes del Frente Renovador.
Desde el entorno íntimo de Kicillof, al que tuvo acceso NA, contestaron que “por el momento” el Gobierno bonaerense no tiene “ninguna postura tomada, porque no se habilitó un diálogo al interior de la fuerza para discutir la estrategia electoral”.
La decisión dependerá en buena medida de si logra hacerse realidad antes de que finalice el año, la aprobación en ambas cámaras legislativas del proyecto del Gobierno para eliminar las PASO nacionales, un objetivo que parece demasiado lejano.
El pedido de reconocimiento de Kicillof
En su discurso, Kicillof pareció dirigirse en todo momento a Máximo Kirchner, a quien hace responsable de la insólita pelea a la que lo arrastró contra Cristina Kirchner.
“Pedimos que el PJ bonaerense que siga insistiendo con el presupuesto y la deuda que la Nación tiene con la Provincia. Que respalde al Gobierno provincial en su pelea con el presidente”, habrían sido, más menos, las palabras del mandatario en su alocución, según pudo reconstruir NA de fuentes ligadas al gobernador.
También Kicillof exigió que el peronismo reconozca el compromiso del gobierno de la provincia “como escudo y red”, para defender al pueblo del “avasallamiento” del Gobierno nacional.
“Por eso necesitamos armar la mejor estrategia para ganarle a Milei. Todos tenemos vocación de unidad, tenemos que mostrarlo en la acción y en la práctica”, habría rematado el gobernador.
Los “trapitos sucios” para Massa
Conciliador, Sergio Massa llamó “a la unidad, a generar cohesión y un proyecto de país para mostrarle futuro a la sociedad”, supo NA de las fuentes consultadas del Frente Renovador.
Las mismas explicaron que Massa no está en contra de que existan diferencias, pero es terminante a la hora de exigir que “los trapitos sucios se laven adentro y no en los medios”.
“Hace 13 años que Massa no iba a una reunión del partido justicialista, pero él entiende que este era un momento para construir unión y llamar a ampliar la unión”, indicaron.