En calle 40 esquina 1 de General Pico se inauguró un “Corazón de Luchadoras de Koriza”, para recolectar tapitas destinadas a la Fundación Garrahan. La actividad contó con la presencia de la intendenta Fernanda Alonso y la diputada provincial, Carina Pereyra.
La jefa comunal participó de una actividad con la Asociación Civil Luchadoras de Koriza. Se trata de un grupo de mujeres que pasaron por la experiencia de atravesar cáncer de mama y que forman parte de un espacio comunitario, trabajando preventivamente en distintas acciones, y que oportunamente le habían solicitado a Fernanda Alonso, colocar en General Pico un corazón para juntar tapitas que luego son enviadas al Hospital Garrahan.
El proyecto “Corazón de Tapitas” también se instaló en el espacio verde “Monolito Lazo Rosa” de avenida Luro y Gentili, en Santa Rosa.
En General Pico quedó colocado en el paseo de Calle 40 esquina 1. A partir de esta obra, la idea es juntar tapitas para el Hospital porteño, y por ello construyeron un corazón donde son acopiadas.
Una vez juntadas, son seleccionadas por colores y derivadas al Garrahan. La obra quedará de forma permanente y está toda hecha de hierro, con una escalera y una abertura para colocar estas tapitas.
De la actividad participaron, además, el secretario de Ambiente y Servicios Públicos, Ramón Alberto Campo; la directora de Ambiente y Desarrollo sustentable, Melina Medus; y el director de Servicios Públicos, Adrián Acosta.
Laura Mangiafico explicó que Koriza es un grupo oncológico: “Somos mujeres que padecemos cáncer de mama y que decidimos, para llevar adelante mejor nuestra enfermedad, hacer trabajos sociales, entre otros este proyecto un corazón de tapitas que busca mostrar que hay un corazón en cada lugar de la Pampa”, expresó, y adelantó que en General Pico se instalará en otro espacio público un segundo corazón.
El nombre de “Luchadoras de Koriza”, explicó Laura Mangiafico, responde a que la enfermedad del cáncer es una lucha diaria.
“Hace siete años que nos formamos, y en un principio trabajamos con los merenderos, con el tiempo el grupo diversificó su trabajo social. La palabra cáncer no es muerte, es sinónimo de vida y de seguir adelante. Esta actividad te motiva a no pensar que tenés la enfermedad, por eso decimos que el cáncer no es muerte, es lucha”, finalizó diciendo Mangiafico.