Tras un proceso de revisión de las estructuras tarifarias, la Municipalidad de General Pico elevó al Concejo Deliberante un proyecto para la modificación del método de cálculo de la tasa del servicio de alumbrado público. Con ello, y gracias a que se cuenta con una infraestructura actual más moderna y de amplia cobertura, se busca quitar un componente variable que la conforma y ajustarla a su costo de prestación.
Es importante destacar que desde el 2019, el municipio implementa estructuras de costos para ajustar las tasas a los efectivos costos incurridos para la prestación de los servicios. Esas herramientas fueron aprobadas por el cuerpo legislativo para otorgarles mayor transparencia, y permitir una correspondencia entre costos y tasas, lo que hace más justa la prestación de los servicios y la asignación de los recursos.
Desde 1999, el servicio de alumbrado está concesionado. Se encuentra reglamentado en la Ordenanza Fiscal y Tarifaria, y la tasa se compone por un cargo fijo por cantidad de luminarias por cuadra, otro cargo fijo por alumbrado de espacios públicos comunes, y uno variable equivalente al 3,5% del consumo de energía eléctrica de cada medidor.
Por lo tanto, tras el análisis realizado definieron ajustar el valor sólo a los 2 primeros conceptos, sin que se altere el costo y la prestación del servicio por parte del concesionario.
Vale mencionar que cuando se constituyó esa estructura, General Pico era una ciudad totalmente distinta, con menos infraestructura y menor cantidad de columnas de alumbrado, lo que requería de inversiones y cobros para su ampliación, situación que cambió drásticamente. Hoy, la ciudad cuenta con más del 90% de su alumbrado con infraestructura LED, lo que permite además un ahorro energético importante.