Introducción

Me pareció interesante comenzar el abordaje de la problemática de las lesiones en el deporte, comenzando con los peques y las prácticas corporales y el deporte.

Primera parte

¡Como diría Anteojito, mi infancia en el recuerdo…para los que peinamos canas recordamos nuestra infancia jugando afuera hasta que generalmente la abuela nos llamaba…a tomar la leche!

Obvio los deberes ya estaban hechos, y si quedaba alguna cuenta o algún trabajo con papel glasé o plastilina, era prioritario finalizar la tarea escolar, antes de salir.

La tarea corporal y física estaba asegurada por los juegos infantiles, con alta demanda física, por recordar nomas, la mancha, el poli ladron (con acento en la A), la rayuela, la soga, el elástico, los carritos de rulemanes, el picadito, etc.

De regreso a la actualidad, como docentes, padres, tíos, abuelos, tutores o encargados, notamos que la vida infantil luego de la escuela, se encerró en 4 paredes.

Esto incluye como expliqué, a nuestras prácticas corporales y juegos.

Recuerdo un artículo que escribí para la revista del ISEF” Ciudad de Gral. Pico” (La Pampa en movimiento”30 años”, La postura y la tecnología en el contexto pandémico, pág. 267), sobre el costo energético y mecánico del uso excesivo de las Tecnologías en Pandemia, tanto para niños como para sus docentes, ese costo sigue aumentando lamentablemente, con consecuencias a futuro.

El uso de las mismas, así como nos permitió comunicarnos, y en gran cantidad de tareas laborales, cambiar para siempre al modo “remoto”, en los niños y jóvenes, el declive constante de movimiento corporal desde comienzos del siglo XXI, ya fue irremediable.

Reemplazando el mismo por el uso de las tecnologías, y ya fundamental en sus vidas, (lamentablemente en muchos casos), del celular (el nuevo chupete electrónico).

 
Distintas sociedades pediátricas y la Organización Mundial de la Salud (OMS) han recomendado no exponer a los bebés a pantallas durante su primer año de vida, y limitar el consumo de televisión, celulares y otros dispositivos a los niños de entre dos y cuatro años, a un máximo de una hora al día.

Estas recomendaciones, ya sabemos, llegan tarde, porque el fenómeno es imparable.

A diario vemos en nuestra tarea, cómo el adulto y la sociedad festejan la destreza temprana en el uso de dispositivos, entonces…

Los estudios científicos observaron que los niños pequeños dejaban de escuchar casi 400 palabras dichas por adultos, dejaban de decir unas 294 palabras, y perdían 68 instancias de conversación por día como promedio.

Por supuesto que hablar de desarrollo cognitivo, inteligencias, maduración, psicomotricidad, socialización, postura y desarrollo en el uso de las tecnologías, da para que cada tópico merezca un gran desarrollo, pero este artículo es sólo una breve introducción, y sólo mi posición al respecto.

¿Y el movimiento?

La OMS advierte que en el mundo, el 80% de los niños y niñas y adolescentes no hacen el suficiente ejercicio diario, lo que puede poner en riesgo su salud.

Disminuir urgententemente el sedentarismo, la inactividad y potenciar la práctica corporal y el deporte, favorece el desarrollo en la niñez.

Actualmente, la actividad física se recomienda en cualquier condición de salud, ello es porque ha mostrado innumerables beneficios, adaptada a cada situación o enfermedad, mejorando en su totalidad el estado de salud (condición cardiorrespiratoria, actitud, estado de ánimo, capacidad de recuperación física, etc.) y la evolución clínica de los niños con enfermedad crónica y discapacidad.

Sólo debe tener su correcta Prescripción, y recurrir entonces a entornos favorables, y con políticas públicas adecuadas.

Podemos ver así cristalizados también los deportes adaptados y los Paralímpicos para niños y jóvenes con enfermedad crónica y discapacidad.

Logrando:

•    Estimular el crecimiento físico y mental: por medio del deporte favorece el proceso de crecimiento, debido a la estimulación que se produce en el tejido óseo y muscular, y las cargas controladas.
•    Desarrollo de capacidades coordinativas, como la percepción espacial, la coordinación ojo-mano y objeto, la coordinación neuro muscular, la agilidad, agudeza visual y ajuste visual y el equilibrio.
•    Explorar las posibilidades y limitaciones corporales, y entonces cómo mejorarlas, el autocontrol, la interacción social, los roles, los liderazgos, y poder sobrellevar situaciones desafiantes y complejas.
•    La acción profunda sobre nuestra salud: ayuda continua como prevención del sedentarismo y sus consecuencias, el sobrepeso y la obesidad.
•    La práctica corporal y el deporte activa el sistema inmunológico, y los ejercicios de fuerza y elasticidad corrigen posturas que ayudan a fortalecer los músculos, huesos, tendones y órganos.
•    Hábitos saludables y comportamientos positivos. Entre ellos, destacamos la alimentación más equilibrada, descanso, hábitos de higiene y organización de tareas.
•    Responsabilidad y respeto: predispone a cumplir diariamente con un compromiso. Durante el juego tendremos reglas y debemos tomar decisiones, y en base a ello, medir las consecuencias.
•    Trabajo en equipo: para tener un buen desempeño, hay que trabajar en equipo. Esto significa, colaborar, sabiendo que nuestro esfuerzo es importante, pero que sumado al del resto, es aún más importante.
•    Potencia las habilidades blandas (Soft Kills), son competencias que no se estudian, son rasgos de personalidad, habilidades socioemocionales, de comunicación y hábitos.

•    La comunicación, el liderazgo y la pertenencia.
•     Reducción del estrés y mejora del rendimiento académico, controlando ansiedad y disminución del ánimo.

 
Esta historia continuará: Dado que esta serie esta provista de varios artículos, a fin de no distraer la atención, al finalizar la serie publicaré la bibliografía de referencia….

Palabras clave

Anteojito fue una revista infantil que alcanzó los 1925 números. El primero apareció en 1964; el último, en 2001. Su director fue el dibujante español Manuel García Ferré, nacido en Almería en 1929.

Se formó en la revista que compitió por la preferencia infantil en Billiken.

Mi infancia en el recuerdo es una recopilación de algunas de las queridas y entrañables historias que durante muchos años formaron parte de la biblioteca de la revista Anteojito.

A lo largo de sus páginas, nos vienen al alma, como canción de cuna, los ecos de nuestra infancia, los recuerdos de seres queridos, de lugares y de momentos especiales.

A tomar la leche: Este dicho pertenece al programa infantil: El capitán Piluso (Alberto Olmedo y Coquito (Humberto Ortiz), famoso en la década del 60.

Inés Jaroslavsky fue la afortunada que patentó ese guiño que no tiene fecha de vencimiento. Tras el grito emblemático de cada tarde, una mano asomaba en cámara, y el capitán tenía su vaso o taza -depende el día- con la leche servida para marcar la cancha de los rituales alimenticios.

A muchos nos quedó las 17 -o las 18- como la hora de la leche.

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(*) Marcelo Rensonnet es Lic. Kinesiólogo Fisiatra_ Docente Universitario – Formado en Inst. Mogilevsky y en Servicio Nacional de Rehabilitación -  Profesor de Educación Física_ Especialista en Neuro rehabilitación - Especialista en Medicina del Deporte – Residencia Clínica en ALPI, Htal. Frances y Htal. Fiorito.