SÁBADO 22 de Febrero
SÁBADO 22 de Febrero // GENERAL PICO, LA PAMPA
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  VIERNES 26/10/2018
Los padres de Agustín Crespo pidieron jury para el juez Gerardo Moiraghi
Abel Crespo y Mónica Escudero son los padres de Agustín Crespo, fallecido en agosto pasado tras un largo proceso de adicciones, por cuya “restricción de la capacidad” –una figura que hubiera permitido internarlo por la fuerza-, la justicia hizo oídos sordos. Acusan al juez por mal desempeño de sus funciones.

Agustín Crespo murió a los 25 años, el 19 de agosto pasado. Puso fin a su vida por decisión propia. Sus padres lucharon con él desde sus 16 años y no consiguieron que la justicia les extendiera la orden que hubiera permitido internarlo, cuando ya habían agotado la búsqueda de respuestas y toda la familia –la pareja y sus cuatro hijos-, estaba quebrada por el tremendo drama que les instaló la droga.

Los padres de Agustín acusan al juez Gerardo Mario Moiraghi, por esos días juez sustituto luego confirmado como titular, de no atender la gravedad del caso y de responderles en forma equivocada, al interpretar en forma errónea el artículo de la ley que ellos dicen que bien interpretado y con todos los elementos reunidos, hubiera permitido internar a la fuerza a su hijo y brindarle la atención que no tuvo.

En un extenso diálogo con MaracóDigital.net, Abel y Mónica ofrecieron detalles de la denuncia que elevaron ahora contra el juez Moiraghi, para el que piden un jury que lo releve de su cargo y revivieron la tragedia vivida con su hijo, que le dejó profundas marcas a toda la familia y hasta amenazas telefónicas inexplicables, tras la muerte de Agustín.

Por momentos quebrados, emocionados, pero firmes en su convicción de que la sociedad necesita otras respuestas, Abel y Mónica explicaron que hablan en público para dejar en claro que la droga en Pico tiene muchísimas más víctimas de las que la sociedad sospecha y que las respuestas son tan pobres como casi inexistentes para los casos agudos.

No tuvieron palabras gratas para las entidades que se ocupan del tratamiento de adicciones en La Pampa. Sin vueltas, sin tapujos, criticaron con dureza a Guadalupe, Rumen y Naim, donde no encontraron alivio y donde descubrieron carencias puntuales para casos como el de su hijo.

AGUSTÍN

Su adicción a las drogas y al alcohol, llevaron a Agustín a una espiral terrible e interminable de violencia y tratamientos inconclusos. Su muerte, que sus padres entendieron anunciada y pretendieron evitar por todos los medios a su alcance, sobrevino a una profunda depresión pues en sus momentos de lucidez, el joven se manifestaba desesperanzado con las posibilidades de recuperación que había para él.

Abel recordó que Agustín “comenzó a consumir marihuana en el colegio secundario. Al día siguiente que murió vino un compañero de él que me contó que se iniciaron juntos con la marihuana en el colegio al que asistían”.

“En algún momento pasó a la cocaína. A los 19 tuvo su primera internación. Fue en el programa Guadalupe, de Santa Rosa, donde estuvo 5 meses…, pero no resultó. Acá en La Pampa no tenés soluciones para el tratamiento de los chicos… esa es la pura verdad. Por los casos agudos hay que recurrir a Córdoba o Buenos Aires, pero sale mucha plata. En Córdoba el costo era de unos 50 mil pesos por mes”.

“Y cuando fuimos a Córdoba nos dimos cuenta que los profesionales están muy formados y que acá no es así. Acá por cualquier cosita te maltratan. No hay una contención ni para el paciente ni para la familia, que sufre igual que el paciente. Recuerdo que después de transitar por tres lugares de La Pampa, en Córdoba nos dijeron cosas que acá nunca nos dijeron” sobre el abordaje de un adicto.

GUADALUPE

“Guadalupe es terrorífico –define Abel-. Ahí me di cuenta como usan a los pibes… generalmente pibes pobres. Cuando pedían subsidios a la provincia, ¿qué hacían?: Internaban cinco o seis chicos y empezaban a presionar a la Secretaría de Adicciones. En ese tiempo estaba Moro. Presionaban hasta que les daban el subsidio. Cuando lo conseguían, de esos cinco o seis chicos no quedaba ninguno”.

“En los 5 meses que estuvimos con Agustín en Guadalupe vimos que el sicólogo Corro Molas, ex marido de la directora,  ahí atendía sólo a los que pagaban en efectivo. A los demás los atendía un chico… a tal punto que Agustín me decía: papá, esto no me sirve. Porque la única atención para ellos era estar encerrados y medicados. Ninguna otra cosa”.

“Cuando lo fui a sacar de Guadalupe me dijeron que lo fuera a buscar, que Corro Molas me lo iba a entregar. Má que Corro Molas… lo encontré afuera, al lado de una puerta pegada a los tapiales, solo, con su bolsito, esperando. Con Corro Molas no pude hablar nunca, entonces volví a traerlo a Pico”.

“Acá inició un tratamiento sicológico y poco después lo llevé a Naim, que funciona en el Campito Centenario. Fuimos a tres entrevistas y lo aceptaron, pero era de 3 a 6 y tenían cursos de cerámica, de cocina y a él no le gustaba, se aburría… y en dos meses que estuvo sólo tuvo tres entrevistas con los sicólogos… me repetía: “papá, esto no me sirve, si querés yo sigo viniendo, para que vos te quedes tranquilo”. No es para las adicciones graves. Y trabajan de lunes a viernes. El viernes a la noche, los sábados y domingos, que son los días que más expuestos están estos chicos, tenés que estar vos”.

“Yo al principio lo tenía preso a mi hijo… me quedaba charlando con él hasta las 5, 6 de la mañana que se dormía… Pero llegó un momento que me di cuenta que no podía tenerlo encerrado eternamente. Empezó a salir y fue cuando volvieron las recaídas de alcohol y cocaína… y lo transformaban en otra persona”.

“Agustín era un pibe buenísimo, ahora, cuando estaba así, era otra persona. Un día agarró la casa a botellazo limpio. Quedaron muestras de esa violencia, paredes marcadas, la puerta de ingreso rota. Pero una cosa es contarlo y otra vivirlo”.

“Lo saqué de Naim, porque él me lo pedía y otra vez volvimos a la misma historia… El quería dejar, pero no podía… quería, pero no podía. Y tenía recaídas. En varias oportunidades entró intoxicado con cocaína y alcohol en el hospital”.

“Probé de entusiasmarlo por el lado laboral. Pensé: por ahí le faltan proyectos, sueños… Le puse un lavadero de autos, compré las máquinas, todo… Me salió mal, me equivoqué, porque al tener plata tuvo más acceso todavía a las drogas… un día estaba trabajando y le agarró una convulsión. Y otra vez al hospital”.

“En febrero de este año tuvo otro suceso de violencia y se desmayó. Estuvo 17 horas en la guardia del hospital. Le hicieron lavajes de estómago pero no lo querían derivar a Salud Mental. Y no era un problema menor. A partir de la nueva ley 26657, el problema de las adicciones es un problema de Salud Mental. Durante esas 17 horas intervino un equipo de médicos clínicos y todo eso y después le querían dar el alta. Mónica movió cielo y tierra para que no le dieran el alta y consiguió que le dijeran que lo iban a dejar de domingo a martes”.

“Iniciamos entonces los trámites para llevarlo a un instituto de Córdoba y mientras tanto nos llamaban a cada rato de Salud Mental para preguntarnos cuando lo sacábamos… querían sacárselo de encima… Es que por más que la ley esté, ellos entienden que el tema de las adicciones no es un tema de ellos”, dice en alusión a los profesionales que se desempeñan en el área de Salud Mental del Centeno.

Y al respecto, Abel ofrece un dato contundente. “El área de Salud Mental debe tener unas 27 camas. Tiene un buen patio, una sala de tv, mesas donde comen, hacen talleres… Y con la problemática grave que hay en Pico, internados hay sólo dos o tres, mientras los siquiatras privados no dan abasto con la cantidad de casos que atienden. Es evidente que no está funcionando de acuerdo a las necesidades”.

RUMEN

“En Rumen yo perdí la cuenta de la cantidad de entrevistas que nos hicieron –repasó Abel-. Creo que fue desde 2016 hasta fines de 2017. En una parte se interrumpió el proceso porque quedaron en llamarnos para darnos un turno… y nunca nos llamaron. Tuve que volver a preguntar qué había pasado. Bueno, volvieron las entrevistas. Y un día, porque yo lo veía mal a mi hijo, fui y les dije: escúchenme, mi hijo se está muriendo. Hasta cuando las entrevistas. Entonces dije que iba a ir a una Comisaría a hacer una denuncia y a contar todo este periplo. Cuando les dije eso, ahí lo internaron”.

“Y me encontré otra vez con lo mismo. 4 o 5 internados, todos tranquilitos y la cantidad de gente que yo vi buscando soluciones para sus hijos, adentro no los vi. El mecanismo de entrevistas para la gente que trabaja es agotador y la mayoría se cansa y no vuelve. Y mientras tanto el chico va empeorando”.

“Lo internaron (en Rumen). Cuando se frena el consumo de cocaína se presentan consecuencias que hay que atacar. La primera son las convulsiones. La irritabilidad.  Le siguen alucinaciones suicidas. El paciente, si no está medicado, entra en un cuadro de depresión aguda. De hecho, Agustín convulsionó adelante del doctor Scafidi estando en Rumen. Fue muy fuerte. Se golpeó la cabeza y le quedaron síntomas neurológicos”.

“Con el tema de la irritabilidad, en Rumen, Agustín se enojaba. Me llamaba y me decía: papá vení a buscarme. En medio de la noche allá iba yo. Hablaba con el operador, que me decía que ellos trabajaban con la voluntad de las personas. Si un interno le decía que se quería ir, le tenían que abrir la puerta. Y yo tenía que volver con Agustín a mi casa. Estuvo menos de un mes en Rumen”.

CÓRDOBA

“A Córdoba fuimos porque en La Pampa ya no nos quedaba más nada. Estuvo un mes. Es un lugar excelente, nos dieron contención, todo… pero es un Centro libre de humo. ¿Qué pasó? Casi el cien por ciento de los chicos que son adictos fuman. Agustín no pudo con el cigarrillo. Aguantó un mes y al mes se nos volvió”.

“Otra vez acá. Y otra vez lo mismo. No era una internación obligada. Tenía la posibilidad legal de salir cuando quería.
Yo le dije a Agustín: hijo, yo quiero que estés un tiempo internado para que te recuperes. El tiempo necesario. Yo no te quiero ir a llorar a una tumba. Porque yo ya veo como va a terminar todo esto. Y no. Seguíamos con estas idas y vueltas…”

“Porque cuando se volvió de Córdoba, Mónica fue a la justicia y les comunicó que había dejado la internación”.

En este punto ambos recuerdan que la ley dice que a una persona en esas condiciones se la debe internar por la fuerza pública si fuera necesario, hacerlo controlar por un equipo de especialistas y determinar sobre la marcha.

“El juez Moiraghi no lo hizo, no lo hizo. Entonces mi hijo siguió sin medicación, sin nada”.

En este punto, Abel y Mónica recordaron que el juez se hizo eco del informe de profesionales del Centeno que lo habían atendido en una urgencia, cuando el tema de fondo era el que conocían bien las entidades por las que había pasado.

Figura en el expediente el informe de Rumen, en el que se especificó que “al momento se encuentra en internación domiciliaria, transitoria y riesgosa, debido a su reincidencia, condición que evaluamos de alto riesgo para su integridad o la de terceros. Sostenemos que el abordaje de un tratamiento residencial es la única alternativa posible para iniciar su recuperación. En tal sentido este equipo valora la necesidad inminente de una internación involuntaria por un período no menor a seis meses”.

En el mismo documento, firmado por el doctor Daniel Scafidi, responsable de Rumen, consta que Agustín en ese momento era considerado “dependiente a la cocaína” y que cometía “abuso de marihuana, abuso de hipnóticos, sedantes y ansiolíticos”.

“Hubo dos informes así –aclararon-. Uno de Rumen y otro de Salud Mental”, que dieron cuenta del grave estado de Agustín. “Las abogadas efectuaron múltiples presentaciones. Nunca nadie nos recibió. Nunca nadie nos llamó de la justicia”.

RESOLUCION

La respuesta que les dio Moiraghi, que nunca los recibió en persona, refleja de parte del juez una interpretación en las antípodas del artículo de la ley según el espíritu que entienden los padres persigue la creación de esa herramienta legal.

O si no, revela que el juez Moiraghi no sólo no recibió a los Crespo sino que tampoco se enteró de la realidad de la situación sobre la que debía resolver.

Porque su resolución, además de las formas legales, dice que “en  relación a lo solicitado (…) el Código Civil y Comercial de la Nación contempla como impedimento legal que el órgano judicial disponga una internación involuntaria de una persona, ya que esta medida sólo está concebida como un recurso terapéutico excepcional siempre y cuando el tratamiento ambulatorio no sea de por vida y solamente a criterio de un equipo interdisciplinario de salud y ante la existencia de alguna situación de riesgo inminente o cierto”.

La negrita nos pertenece. Porque es precisamente lo que la familia Crespo estaba sufriendo, sin que el juez ahora denunciado se percatara de ello.

“El juez nunca hizo lugar a nuestros pedidos –repiten ambos-. Ni la historia clínica pidió. Nuestras abogadas solicitaron se cite a conocidos profesionales que lo atendieron para dar fe de la gravedad de su estado. Tampoco se oyó ese reclamo”.

El expediente termina con una ironía tan terrible como todo el caso. Como a Agustín se le designó abogado defensor, también se dio intervención a la Oficina de la Mujer y de Violencia Doméstica. La lenta burocracia hizo que la familia Crespo recibiera la cédula para que Agustín compareciera en Santa Rosa el 6 de setiembre de 2018 a las 9,15 horas.

“El 6 de setiembre –repite Abel con todo el dolor del mundo sobre sus hombros-. Mi hijo se suicidó el 19 de agosto”.
 

Comentarios
 
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 29/10/2018 | 10:14 Hs
Enviado por Lorena
En La Pampa no hay una institución seria capaz de contener a los chicos/Adultos con problemas de adicciones. Rumen, una vergüenza que nadie controla, y no hay en Pico un solo lugar al que puedan ir las mujeres con este problema... Por experiencia propia, no tendríamos a nuestro familiar con nosotros si no fuera porque un juez coherente en su momento lo derivó a internación en Bs As.
 
 28/10/2018 | 18:16 Hs
Enviado por omar
solo digo la droga es un gran negocio para unos pocos que se creen patrones de los demás , son amigos de los políticos ,son amigos de la policía ,paso esta semana algo que nadie dice nada ,la policía federal secuestro 137 kg destinada a general pico y nadie dijo una palabra
 
 28/10/2018 | 12:04 Hs
Enviado por Abe Crespo
Cuando Agustín abandonó la comunidad terapéutica en la provincia de Cba, el Juez Moiraghi fue notificado, ¿que hizo? NADA. ¿Que podría haber realizado? CCyC: ARTICULO 42.-Traslado dispuesto por autoridad pública. Evaluación e internación. La autoridad pública puede disponer el traslado de una persona cuyo estado no admita dilaciones y se encuentre en riesgo cierto e inminente de daño para sí o para terceros, a un centro de salud para su evaluación. En este caso, si fuese admitida la internación, debe cumplirse con los plazos y modalidades establecidos en la legislación especial. Las fuerzas de seguridad y servicios públicos de salud deben prestar auxilio inmediato. ¿El riesgo existía o no? Fuimos a la justicia para que mi hijo NO MURIERA y ¿cuál fue el resultado? Nuestro hijo MURIO! ¿Representaba un peligro para sí mismo? El resultado está a la vista! El JUEZ debió bajarse del púlpito inalcanzable para dialogar con la plebe (nosotros) nunca lo hizo! Sí no tenes SENSIBILIDAD Y "ALGO" DE HUMANISMO, NO PODES SER JUEZ. Y a esta NN (Soledad) que escribe ¿que tiene que ver el patriarcado con la muerte de mi hijo? Estoy de acuerdo en que hay que conocer la leyes por eso transcribí el Artículo 42.
 
 27/10/2018 | 20:26 Hs
Enviado por Soledad
... (Con identidad real y DNI)
 
 27/10/2018 | 12:45 Hs
Enviado por la lucha eterna
Estimada familia Crespo, lo primero que voy a decir es que lamento mucho lo sucedido y lo que ustedes relatan es tal cuál, y creeanme que los entiendo con conocimiento de causa. Las adicciones, no es una problemática solo del adicto, es un problema que afecta a todo el entorno familiar y lamentablemente mas temprano que tarde te va quebrando y llevandote puesto. Soy un papa que sufre esa problemática, tal vez con matices diferentes, pero en definitiva el padecimiento es el mismo. Uno lucha, lucha y choca una y otra vez contra un sistema que no está preparado para abordar este flagelo. Es muy grave todo lo que sucede, porque en nuestra desesperación muchas veces hablamos o buscamos ayuda en las personas y en los lugares equivocados. "Hay que poner límites a los hijos nos solían decir", cosa no sensilla, porque no existe un manual para ser papa. Recurríamos a la justicia, y nos decían no podemos hacer nada al respecto, no le dabamos dinero- , incurría en el delito y era detenido, ahí sí, actuaba la justicia, pero lo juzgaban con el código penal en la mano y condenaban según el delito cometido, sin contemplar ni entender cuales fueron los motivos o las causas que lo llevaron a delinquir. Seguramente tendrán una vaga idea de lo que sucede dentro de un sistema carcelario, no vale la pena ahondar en el tema, porque es muy triste lo que ahí dentro sucede. El chico cumple, sale en libertad y ahora el problema es más grave, porque no solo sigue siendo un adicto, sino que ahora tiene antecedentes, y para la sociedad, "es un delincuente que no merece vivir", pero vos sabés que no es así, que tu hijo no es eso que dicen, y el dolor y la impotencia te invaden, ante comentarios de ese tenor. Pero también hubo en la justicia, gente muy humana que intentó ayudar, que fue el Juez De Marco, pero bueno hoy ya no está en la justicia. En cuanto a Naim, aprendí mucho, sobre todo cuando estaba en nuestra ciudad el padre Nestor, un gran tipo que metía los pies al barro, y hasta lloramos juntos alguna vez, pero lamentablemente se tuvo que ir de nuestra ciudad. Guadalupe y Rumen, es tal cuál lo relatan los papas de Agustín en esta nota. En fin, muchos años de lucha, a veces parece que todo empieza a ir bien y cuando te ilusionás y crees que la cosa se encamina, zas, una recaída tira todo por la borda y vuelta a empezar. Familia Crespo, no aflojen, sigan peleando y aunque no me de a conocer por razones que seguramente ustedes sabran entender, sepan que esto que ustedes hacen nos sirve y mucho a quienes peleamos desde hace mucho tiempo, por la recuperación de nuestro hijo. un abrazo LA LUCHA CONTINUA.
 
 27/10/2018 | 12:01 Hs
Enviado por Fernando
El evaluacion de la gestion administrativa, economica y de funcionamiento de las instituciones privadas de salud mental y adicciones YA no pueden ser evaluadas por el propio estado, debe asumir esta responsabilidad la sociedad civil. Sobre la justicia espero se HAGA JUSTICIA. La designacion de los jueces y fiscales no puede hacerla el poder ejecutivo, ahi empieza el PROBLEMA
 
 27/10/2018 | 11:24 Hs
Enviado por Dani
Soledad, en ésto en particular, que cara... tiene q ver el patriarcado? Me indigna cdo. se van por las ramas....
 
 27/10/2018 | 09:15 Hs
Enviado por Esto se llama Argentina.
Te quedas sin trabajo y nadie te ayuda. Tenes un problema serio como esta familia y nadie te ayuda. Y asi todo. Nos hemos acostumbrado a vivir en un pais donde el "salvese quien pueda" es Natural. Y no es asi. Hablan de millones de dolares y yo me pregunto: adonde estan?. Porque invertidos en la sociedad yo no los veo. Imaginate por un segundo este gran pais habitado por japoneses. Ya son potencia viviendo en una isla, imaginate lo que harian con este pais lleno de riquezas naturales.
 
 26/10/2018 | 21:14 Hs
Enviado por Soledad
(...) Cuando vamos a tomarnos el tiempo de conocer nuestras leyes para saber como defender nuestros derechos? y no gastar tiempo y energia en acciones que dañan a las personas y nosotros mismos. La salud es derecho y el Patriarcado esta llegando a su fin.
 
 26/10/2018 | 21:08 Hs
Enviado por Jane
Es hora de que los que tienen el poder de cambiar las cosas, se pongan los pantalones largos y actúen. Y si no actuaron, que den cuentas. Es lamentable que haya sucedido esto. Pero más lamentable es que después de ésto nada pase para mejorar o sentar precedente.
 
 26/10/2018 | 12:39 Hs
Enviado por Viviana
Normalmente, los que se van a golpear el pecho a la Iglesia, para hacerse ver, son los que más van por izquierda en la vida. Y no van ahí para mejorar. Sus conciencias están llenas de malas ambiciones... Si, ese ctro. Piquense que mencionan, carece de mucho! De ... Negocio, negocio y negocio!!! Es asqueroso saber y que conste que se mueven de ese modo!. Felicito al matrimonio Crespo por ésto, y ojalá se vaya por más..
 
 26/10/2018 | 11:14 Hs
Enviado por Lucre
Moni! X dios! Recien me entero.... lo lamento mucho.... te deseo la mayor de las fuerzas...sos una gran mujer.....sin palabras, como madre siento tu dolor. Ojala se haga justicia! Templanza y mucha paz....
 
 26/10/2018 | 10:31 Hs
Enviado por piquense
...
 
 26/10/2018 | 08:24 Hs
Enviado por Guillote
Leo el artículo y me parece ver mi futuro familiar; que el caso de Agustín sirva de punto de partida para sentir un acompañamiento adecuado a las necesidades de nuestros familiares. Que la justicia cumpla el rol que le corresponde para que los afectados no sentirnos tan desprotegidos. Flia Crespo, que su lucha no sea en vano. En muchos hogares de nuestra ciudad hay un Agustín que nos necesita a todos.
 
 26/10/2018 | 08:12 Hs
Enviado por Luis
A pesar de todo el dolor que llevan a cuestas ¡Tenés unas "bolas" inmensas "Chulo"! igual que tu mujer. Creo que un gran porcentaje de la gente desconocemos todos estos detalles que contás de los supuestos centros de rehabilitación para estos chicos en La Pampa. Un abrazo y sigan hasta las últimas consecuencias!
 
 26/10/2018 | 07:39 Hs
Enviado por Profe 22
Lamento mucho la perdida de tu hijo y te acompaño en el dolor. Pero en cuanto a Rumen yo trabaje ahi como Operador durante 2 años y la verdad que el modo de trabajar de la institucion deja mucho que desear y no estan formados para dar contencion a los chicos con problemas. Es lamentablemente un negocio en donde la Comision Directiva de Rumen encabezados por el Dr Daniel Scafidi solo le importa los fondos que les manda Provincia y Nacion Lamentable situacion para toda la Sociedad Piquense..
 
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