Tras el fuerte temporal, Federación Agraria Argentina (FAA) advirtió que las pérdidas han sido “importantes” para los productores. El granizo, en ciertos sectores con tamaños similares a una naranja, ocasionó serios daños en campos del norte pampeano y afectó a unas 6 mil hectáreas de cultivos.
“Toda esa zona se ha convertido en el corredor típico de violentas tormentas, y desde hace años, cascos urbanos afectados y ni que hablar del sector agropecuario que viene siendo castigado por varias temporadas, granizadas cada vez mas grandes, fuertes vientos huracanados, excesos de lluvias, inundaciones y también períodos demasiados secos”, sostuvo la filial pampeana en un comunicado de prensa.
“Para los no vinculados con el sector, seguramente les molestará la preocupación de quienes invierten a cielo abierto, siempre propensos a estos riesgos, y cuando los eventos se repiten por años, las descapitalización y desánimo cunde en el sector primario de la producción de alimentos y divisas que se reparten en toda la sociedad”, agregó la entidad.
La conducción del Distrito 8 – La Pampa, que integran los directores Ariel Toselli, Néstor Soria y Adolfo Sánchez, trabajan en un relevamiento de los daños causados por el evento climático que afecta a cientos de pequeños y medianos productores y a las cooperativas agropecuarias de la región.
“Alrededor de 6000 hectáreas, quizás más se vieron afectadas por la tormenta del pasado lunes 10 de diciembre”, estimó la federación. “Cosecha fina a levantar y cosecha gruesa implantada en crecimiento, pasturas, infraestructura , camionetas y maquinarias dañadas suman una cuantiosa pérdida económica para un sector que no la pasa de lo mejor, y máxime si esos eventos ocurren año a año”, detalló FAA.
“Los distintos medios periodísticos ya fueron amplios con su información y material fotográfico comparando el tamaño de las piedras con un huevo de gallina o una naranja, maquinarias volcadas por la intensidad del viento, camionetas y tractores aplastados por árboles vidrios rotos, lotes de trigo ‘trillados’ por la piedra, maices y girasoles que prácticamente desaparecieron son el saldo amargo de una esperanza para muchos de salir de sus deudas o al menos achicarlas”, finalizaron.
El Consejo de Delegados fue convocado para el próximo jueves 13 de diciembre en la localidad de Rancul, para programar las gestiones ante quien corresponda y llegar con un paliativo a los perjudicados.