Entre la decena de reclamos efectuados, también escribí al sitio “Tu Queja Vale”, del que participa Frávega y otras empresas que reciben reclamos de clientes… con idéntico resultado negativo.
Varios de mis interlocutores se mostraron “¡sorprendidos!” por lo que me estaba pasando. Y recibí promesas, incumplidas claro, porque nunca enviaron el televisor.
EL CUENTO DEL TÍO
Siempre traté de no resultar sorprendido por esta “fea” maniobra y siempre tomo recaudos para que no me hagan el “cuento”. Pero está visto que nunca se termina de aprender.
Ni que hablar que antes de efectuar la compra busqué mucha información y preguntéy leí sobre experiencias similares. Y recurrí a una firma supuestamente libre de toda sospecha, muy reconociday sobre todo con excelente trayectoria.
LA COMPRA
Elegí FRAVEGA por trayectoria y reconocimiento: el 2 de noviembre del año pasado (2017) compré vía internet el televisor Samsung.
En mi localidad esa maravilla tecnológica no estaba disponible. Además, era un día de “ciber ofertas” que potenciaba las posibilidades para comprarlo.
FRAVEGA, con reconocida trayectoria y todo lo demás que describí en la parte anterior, me daba respaldo, tranquilidad…
COMIENZO DE LA MANIOBRA
Pero apenas al día siguiente comenzaron mis “asombros”: me habían facturado y cobrado 2 televisores iguales.
Después de la sorpresa: el reclamo. Reconocieron el error y a los pocos días anularon una de las facturas de venta y acreditaron la cuota de la tarjeta de crédito que ya habían cobrado. Hasta ahí era eso: un error subsanado en tiempo y forma.
FRAVEGA, EL CUENTO DEL TÍO
¡Pero... en realidad no terminó. AHÍ COMENZÓ EL CUENTO! Me aseguraron el envío en un plazo de un poco más de 10 días (transporte a confirmar)…y los días fueron pasando de a 10. Y continuaron las promesas incumplidas, hasta que me avisaron que el televisor que me vendieron había salido de producción (me vendieron un aparato que no tenían, ¿se entiende?).
Propusieron, entonces, el canje por otro televisor modelo similar, nota de crédito y nueva facturación, cosa que acepté y todo al mismo precio que la compra inicial.
¡¡¡¡Era el fin de los problemas!!!!
Pero…no!
¡Continuaba la “maniobra FRAVEGA”: más promesas, más sorprendidos, hasta que dejaron de comunicarse!
Nunca vencido, recurrí a otras vías de comunicación, continuó el dialogo…
Hoy siguen con la misma forma: disculpas sentidas, sorprendidos, escalamiento de jerarquías de e-comerce (comercio electrónico) para una rápida resolución.
Para completar: a través de la Oficina de Defensa del Consumidor el representante legal de FRAVEGA propuso anular la venta y devolver los cupones pagos (las cuotas de la tarjeta de crédito). En los tiempos y forma del emisor del plástico, eso a 120 días de la compra. Con la devaluación que implica ese tiempo. Desde aquel momento no hubo más comunicación, no más propuestas…
Mientras tanto creo que voy a ver Rusia 2018 en mi antiguo televisor. Además ahora soy accionista (me imagino) de FRAVEGA ya que llevan usando mi dinero hace más de 150 días...
Soy pacífico, paciente, no me gusta la alta exposición… ¡¡Pero quiero que me entreguen mi televisor, sin dudas!!
Datos
Compra: modelo UN55KU6300, factura 2855-00573184.
Canje propuesto: artículo 501761, modelo UN55MU6300
Alberto Emilio Ferrero
7.365.804
Hay documentación respaldatoria de todo el relato
P.D: En sitios de denuncias hay muchas expresiones de reclamo por este motivo y otros también: entrega de productos dañados y no reemplazados y falta de cambio de productos mal entregados entre otros.