Pese a los esfuerzos del ministro de Energía y Minería, Juan José Aranguren , por intentar congelar los precios de los combustibles durante dos meses, las empresas petroleras tienen cada vez más presión para aumentar las naftas y el gasoil en los próximos días.
La suba, estimada en el nivel de 1,3%, se debe a la modificación del Impuesto a los Combustibles (ITC), que figura en el Decreto 501/2018 publicado este viernes en el Boletín Oficial.
Luego del salto del dólar a $25 a mediados de mayo, el ministerio de Energía habia cerrado un acuerdo con YPF , Pan American Energy y Shell Argentina, por el cual estas petroleras se comprometían a poner en pausa los precios de los combustibles hasta el 1° de julio. Era un antídoto para conjurar parcialmente los efectos de la devaluación sobre los precios. Sin embargo, dicho acuerdo es un tema que corre paralelo a la actualización del impuesto a la comercialización.
Este punto forma parte de la reforma tributaria aprobada el año pasado, que cambió el esquema impositivo por el expendio en estaciones de servicio. En términos nominales, el salto será de alrededor de 34 centavos.
Con el nuevo incremento, el litro de nafta súper se pagara $26 en la ciudad de Buenos Aires y el Conurbano, mientras que en el interior del país el litro en las estaciones de servicio costará 28 pesos.
(La Nación)