Soledad Pastorutti y Luciano Pereyra materializaron la jornada de mayor convocatoria de público de la 57ma edición del Festival Nacional de Folclore de Cosquín.

Además, los músicos coronaron la noche con un emotivo momento en el que se unieron para homenajear al fallecido Horacio Guaraní.

"La Sole", dueña de un carisma único que logró encantar a toda la Plaza, prendió fuego el escenario Atahualpa Yupanqui. En momentos acompañada por su hermana Natalia y con una formación musical de batería, bombo, dos guitarras, bajo, percusión, teclados, violín y acordeón, la cantante oriunda de Arequito ofreció un concierto que se inició a las 22.35 y concluyó una hora más tarde.

Pastorutti arrancó a puro vértigo con algunos chamamés y luego pasó a tocar varias chacareras clásicas como "Del norte Cordobés", "Entre a mi pago sin golpear", "A Don Ata" y "Alma, corazón y vida".

Pasada "La Sole", llegó la propuesta Tierra de Canciones, a cargo de los jóvenes cantantes y compositores Fran Lanfré, Javi Caminos y Seba Cayre; después un grupo japonés instrumental, que ejecutó con igual intensidad y matices una composición de Astor Piazzolla y otra de Yupanqui,y luego una deslucida presencia de la delegación santafesina, que el año pasado enloqueció a la plaza con Los Palmeras y Jorge Fandermole.

En tanto, Luciano Pereyra, el otro plato fuerte de la noche, se hizo desear en la Plaza ya que apareció en el escenario a la 1.50 de la madrugada, para un set que arrancó con "Eres mi vida" y continuó con "El elegido" y "Zamba para olvidar".

Promediando su show, Pereyra invitó a "La Sole" y juntos rindieron homenaje a Horacio Guaraní, al que ambos tantas veces admiraron, y de quien interpretaron canciones como "No quisiera quererte" y "Salteñita de los valles".

(Clarín)