Un caso dramático conmueve a la comunidad de Kansas, Estados Unidos. Un hombre de 35 años fue detenido por vivir en un depósito con sus dos hijas, una de ellas recién nacida.

En el momento en que era arrestado, confesó que guardaba los restos descuartizados de su esposa en una heladera portátil.

La policía de Lenexa recibió una denuncia de un vecino sobre una persona que vivía en un depósito. Cuando los agentes se acercaron al lugar encontraron a Justin Rey junto a sus dos hijas, una de dos años y la otra de apenas cinco días.

Sobre la muerte de su esposa, Jessica Monteiro Rey, dio varias versiones. Primero dijo que murió dando a luz en una habitación de un hotel en Missouri, el Woodspring Suites; después aseguró que se había suicidado tras el parto, según informó el diario The Kansas City Star.

La mujer fue vista por última vez el 20 de octubre. Los empleados del hotel contaron que el 23 de octubre un hombre llamó a la recepción fingiendo una voz de mujer para avisar que desocupaba la habitación. Sin embargo, en las cámaras de seguridad sólo se ve salir a Rey junto a sus hijas y cargando una heladera portátil roja.

La hermana de la víctima, Rhonda Monteiro, contó que identificaron a Jessica por sus huellas dactilares. "Podría haberla llevado a un hospital pero no lo hizo. En lugar de eso, la cortó en pedazos y la puso en una heladerita", dijo.

Por el momento, mientras la policía evalúa qué cargos presentar contra Rey, Telefé Noticias informó se encuentra detenido por poner en peligro la vida de sus hijas al vivir en un depósito, donde no tenían acceso a baños, comida o pañales.