Parece casi surrealista que Alan Ruschel, uno de los defensores del Chapecoense que fue protagonista de la tragedia aerea, este dando una entrevista a tres semanas de haber pasado el peor momento de su vida. En diálogo con el programa Fantástico, de la Red Globo, el lateral contó que un cambio de asiento le salvó la vida.

"Me acuerdo que estaba sentado en el fondo, en una de las últimas tres filas... Jakson Follman me llama y me dice: 'ven, siéntate conmigo' y fui a sentarme a su lado porque era él. Lo conozco desde el año 2007, entonces salí de mi asiento y me fui con él. En ese momento me estaba salvando la vida", dijo visiblemnete emocionado.

La decisión perimitió que Ruschel hoy pueda contar lo que le pasó, ya que de lo contrario probablemente hubiera fallecido, como la mayoría de los pasajeros del vuelo de LAMIA que se encontraban en las últimas filas.

"Sólo Dios puede explicar por qué sobreviví al accidente. Me agarró y me dio una segunda oportunidad", aseguró. Ruschel, de 27 años, fue uno de los seis supervivientes del avión, que se estrelló contra las montañas cerca de Medellín.

Además, durante la entrevista el futbolista contó lo último que recuerda: "Fue un vuelo tranquilo y regular, y de repente las luces se apagaron y se encendió la luz de emergencia. Le pregunté (a Hélio Neto) si decía algo (la cabina), dijo que no. Y se puso a rezar, pidiendo a Dios que nos proteja a todos. Y de ahí que no recuerdo".

Pensando en el futuro, el lateral de 27 años comenzará una larga recuperación para volver a jugar al fútbol: "Puedo volver a jugar de aquí a unos cinco o seis meses, porque necesito tres meses para que se calcifique y luego restaurar la masa muscular".

Fuente: TN