Jugaba al límite y lo cruzó. Alexander Polli murió el pasado lunes luego de chocar contra un árbol durante un salto BASE en los Alpes franceses. Era una de las estrellas más conocidas del deporte extremo en todo el planeta.
Cuando llegaron, los rescatistas encontraron consciente al hombre, aunque con múltiples heridas que no le permitieron sobrevivir al impacto. Murió pocos minutos después en el lugar (en el Couloir de l’Ensa, en Chamonix).
Polli, nacido en Noruega y criado en Italia, es el 29° saltador BASE que muere este año practicando la peligrosa experiencia extrema. Aunque ninguna muerte golpeó tan fuerte como la de él porque era el mejor de todos.
El noruego era conocido por sus proezas, aunque en 2013 había sorprendido al mundo al atravesar la roca foradada de Montserrat en Cataluña a 250 km/h, luego de saltar de un helicóptero.
Era un pionero de los vuelos con traje con alas (wingsuit) y tenía 31 años.
Lamento
A las pocas horas de la muerte de Polli, la World Wingsuit League emitió un comunicado en el que lamentó el fallecimiento del deportista.
“Lamentamos comunicar otra gran pérdida a la comunidad de salto BASE. Alexander Polli falleció hoy en Chamonix, Francia. Alex era conocido por sus líneas de proximidad y ese legado sigue inspirando a nuevas generaciones de saltadores en los próximos años.
Aparte de paracaidistas, amigos de todo el mundo echarán en falta su energía, espíritu libre y risa contagiosa. Nuestros mejores deseos a todos aquellos inspirados por la fuerza vital de Alexpara hoy y esperanza para mañana. RIP”, dijeron.