El domingo 11 de diciembre de 2016, en el salón del Metileo Fútbol Club, mataron al sonidista y animador Juan Carlos Geraldo. La noticia causó un gran dolor en el ambiente de la música. Este martes 30 de mayo, en los Tribunales de General Pico, comenzó el juicio contra el único imputado por el homicidio, el trabajador rural Diego Rodolfo Torres. 

Pese a que el juicio recién comienza, se estima una pena que no estará por debajo de los 8 años de prisión. El debate contó con la presencia del juez Federico Pellegrino, la fiscal Ivana Hernández y el abogado defensor del acusado, Oscar Ortiz Zamora.  

En los alegatos, la fiscal Hernández expresó que "el 11 de diciembre del año pasado, Torres le aplicó una puñalada por la espalda a Geraldo, ocasionándole heridas que le provocaron la muerte”, según consignó el diario La Reforma. 

“Torres tuvo un altercado con el damnificado. Cuando se hallaban desarmando los equipos, Torres le hace una manifestación a Geraldo quien le pide que lo deje trabajar tranquilo y el imputado sin mediar palabras le asesta una puñalada en la espalda que resultó mortal”, resumió la magistrada. 

Ortiz Zamora va por la legítima defensa 

El abogado de Torres aseguró que su defendió actuó en legítima defensa. “Hubo una discusión y agresión de parte de Geraldo, mi cliente intentó defenderse y evidentemente tuvo, a mi criterio, un exceso en la legítima defensa, no le quedaba otra alternativa”, detalla la edición de La Reforma.  

Inmediatamente el imputado ejerció su derecho a declarar en juicio y diagramó una estrategia verbal irregular y de escasa veracidad. El hombre señaló que Geraldo, esa madrugada, había discutido con el cantinero por una cuestión menor y que él trató de terciar en esa controversia tratando de calmar los ánimos. 

“Interferí para que la discusión no pasara a mayores, (Geraldo) me empujó, me tiró una trompada que me hizo caer y quería agredirme con un elemento contundente. Quise abrazarlo para que no me pegara, le apoyé el cuchillo pero sin intención de introducirlo, pero le entró, el hombre se metió al salón, no pensé que era para tanto, me enteré después (de su muerte). Por eso agarré la moto y me fui para el campo, porque tenía que entrar a trabajar”, explicó el rural, aclarando que el cuchillo utilizado se lo había entregado a su amigo el cantinero para ‘que lo cuidara’. 

La declaración de un compañero de ruta 

José María Reinoso y Geraldo trabajaron juntos por 7 años en esto de la música. Ayer, el hombre atestiguó y ofreció precisiones determinantes para el proceso. Además de coincidir con el relato de la fiscal en cuanto al recorrido de los hechos, Reinoso aportó un dato clave: la observancia del momento en que Torres le acababa de introducir el cuchillo en la espalda de su compañero de tareas.  

“Ví cuando sacaba el cuchillo de la espalda, en el corredor que va del sector de ingreso al salón, muy cerca de la parrilla. Tengo más de 30 años con la música y las fiestas populares, jamás me había pasado algo así”, graficó. 

Según aportó, Torres se mostró agresivo verbalmente con ellos cuando acabó la peña. Acostumbrado a lidiar con los ebrios de última hora, como sucede habitualmente en este tipo de encuentros, Reinoso afirmó que en todo momento trató de soslayar la presencia agresiva del imputado.  

“A mí me tildó de negro muerto de hambre, afuera y adentro nos estuvo molestando, ‘Carlitos’ se lo quiso sacar de encima pidiéndole que nos dejara trabajar tranquilos, pero no hubo caso, siguió con la suya y terminó de la peor manera”, afirmó.