Dolor, llanto y escenas de violencia se vivieron anoche en la comisaría 1° de Pergamino, cuando se dio a conocer la identidad de los siete presos que fallecieron a raíz de un incendio ocasionado por un hecho que aún no está esclarecido.

Al conocerse la tragedia, familiares de los reclusos fueron hasta la dependencia policial para pedir explicaciones y saber cuál era el estado de salud de sus seres queridos. Hasta entonces, nada se sabía y las autoridades no se habían comunicado con los deudos.

Poco después de las 20.30, un agente de la policía buscaba tranquilizar a familiares y amigos de los presos se habían amontonado frente a la puerta del destacamento. En la calle, y ante la vista de todo el público, el oficial leyó el informe con el listado de personas que no pudieron ser salvadas del accionar de las llamas.

Las víctimas fueron identificadas como Sergio Filiberto, Federico Perrotta, Alan Córdoba, Franco Pizarro, John Mario Claros, Juan Carlos Cabrera y Fernando Emanuel Latorre. Claros, de nacionalidad colombiana, iba a gozar hoy de prisión domiciliaria.

Al conocerse la identidad de los presos fallecidos, estallaron las escenas de dolor. Y de bronca. Hubo incidentes y agresiones contra los uniformados, que fueron contestadas con balas de goma.

En total, en el pabellón había 19 internos alojados. Doce de ellos pudieron ser rescatados del fuego por personal de Bomberos.

Según voceros policiales, alrededor de las 18.30 comenzó una pelea entre parte de los 19 presos que estaban alojados en la comisaría ubicada en la calle Dorrego 654. Son varias hipótesis que se manejan: una de ellas es el malestar que se desencadena por el hacinamiento que es moneda corriente en la seccional. Ello habría desencadenado una suerte de motín con quema de colchones, en reclamo de mejores condiciones de alojamiento.

Otra versión que es investigada por el fiscal Nelson Mastorchio apunta a que el enfrentamiento se originó por la presencia de dos acusados de abuso sexual a una estudiante de abogacía. Se trata de un hecho que provocó conmoción en Pergamino, y uno de esos imputados habría sido agredido por un detenido.

Un joven de 19 años se entregó hace pocos días voluntariamente a la policía de Pergamino, donde admitió haber sido partícipe del asalto de la estudiante que resultó atacada sexualmente. Sobre este delito, aclaró que no tuvo participación y aportó los datos de quien habría sido su cómplice.

Es tras la detención del segundo sospechoso y su ingreso a la dependencia policial que habría existido un cruce con su compañero.

El sospechoso de la violación estuvo en la zona incendiada de los calabozos en el momento de la pelea. Tanto él como su cómplice sobrevivieron al incendio.

Fuente: Infobae.com