El hecho tomó conocimiento público hace una semana. El lunes pasado, frente a la Municipalidad de General Pico, la Asociación Trabajadores del Estado acompañó a la empleada monotributista Marianela Hartfield quien denunció a su superior Carlos Chamas por “violencia laboral”.
Aquel día, la joven habló de “insultos, malos tratos y burlas por su condición sexual”. Al mismo tiempo, el jefe de Defensa al Consumidor, Carlos Chamas, negó todo tipo de hecho y se mostró “sorprendido” por la denuncia.
Este lunes, a siete días de la primera movilización, ATE llegó hasta la Terminal de Ómnibus de General Pico y se dirigió a la Oficina 3 donde funcionar el área municipal. “La situación de Marianela está en el aire y no sabemos qué va a pasar con su trabajo”, expresó María Ester Campos en diálogo con MaracóDigital.net.
“La compañera no sólo denuncia violencia y discriminación, sino que también es una trabajadora precarizada por su condición de monotributista. En las próximas horas, el abogado Ezequiel Marquesoni enviará una carta documento al Ejecutivo Municipal”, concluyó la secretaria general de ATE.