Al menos 79 personas murieron este martes a causa del sismo de 7,1 grados que sacudió la Ciudad de México, causando escenas de pánico entre sus 20 millones de habitantes, justo cuando se conmemoran 32 años del terremoto que destruyó la capital en 1985.

La mayoría de las muertes se registraron en el estado Morelos, cercano al epicentro. El gobernador de Morelos, Graco Ramírez, informó en su cuenta Twitter de 42 muertos en su jurisdicción y su par del estado de México, Alfredo del Mazo, reportó a Milenio Televisión al menos cinco fallecidos más. Previamente el presidente municipal de Puebla, epicentro del sismo, había reportado dos víctimas mortales.

El sismo -que el Instituto Sismológico de México estimó en un principio en 6,8, pero luego lo ascendió a 7,1-, tuvo su epicentro 7 kms al oeste de Chiautla de Tapia y una profundidad de 57 kilómetros, consignó la agencia AFP.

El movimiento telúrico tiene lugar el mismo día que el poderoso sismo de 1985 que produjo daños generalizados en la Ciudad de México y miles de muertos. Según se informó, ocurrió casi una hora después de que México realizó el gran simulacro en todo el país de ese terremoto, publicó el portal Univisión.

Hasta el momento no se conoce el alcance de los daños, pero las imágenes y testimonios que circularon por redes sociales muestra escenas de pánico, edificaciones parcialmente derrumbadas y viviendas agrietadas. También se ordenaron evacuaciones masivas de edificios a lo largo del Paseo de la Reforma.

En el aeropuerto de la CDMX se registraron una gran cantidad de grietas en el suelo, algunas de aproximadamente 10 metros de largo. Por esa situación se suspendieron todos los trabajos para poder revisar las instalaciones.

A través de su cuenta de Twitter, el coordinador nacional de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación, Luis Felipe Puente, escribió: "Al momento no se reportan daños. Se encuentran activos los protocolos de atención y respuesta".

El pasado 7 de septiembre, un terremoto de 8,1, el más fuerte en un siglo en México,  dejó 96 muertos y más de 200 heridos en el sur del país, especialmente en los estados de Oaxaza y de Chiapas.